Monólogo de biblioteca(1ª parte)
Señoras y señores, ... estrellas del porno ,francotiradores de al fondo de la sala, muy buenas. Uno no se hace adulto hasta que descubre el mundo de las bibliotecas, y digo mundo porque allí las leyes son distintas , al igual que el comportamiento de la gente...., resulta que a todo el mundo que le preguntas, no le gusta estudiar, no?. Joder! Pues que bien lo disimulan, la gente es capaz de llegar media hora antes de que abran, para coger sitio, y eso no es lo peor, porque en cuanto se abren las puertas, como si de las rebajas se tratase la gente sube corriendo, pisándose unos a otros; no se sacuden porque aún son las 8 de la mañana y están dormidos. Se sitúan de forma estratégica, a unos les gusta la ventana así pueden mirar lo bien que se está fuera (llamémosles masoquistas) y a otros estudiar cerca de la puerta para no perderse a nadie que entra. El problema viene cuando le quitas un sitio a un opositor, pues es gente que por falta de contacto con la sociedad son capaces de llegar al asesinato, porque alguien se ha sentado en SU SITIO, que no es más que una mesa arañada por el estrés y con dibujos que solo él, conoce su significado. Uno está ahí sentado y viendo que se le pone la cara morada y va a empezar a soltar insultos en lenguas vernáculas y escupir espumarajos verdes, decide cambiarse de sitio. Pero, ahí viene el siguiente problema, porque .... al levantarse, resulta que casi todos los sitios excepto ése que está entre medias de varias personas , está ocupado por el ente, apuntes de otro.
Resulta que allí cada mesa tiene un jefe, es como estar dentro una película de mafiosos:
-Si quieres este sitio Bambino tendrás que hablar con la mia Mamma .
Cada dos sitios hay uno reservado para el amigo o en su defecto para la pareja del capo.
Así que acaba tocando el sitio entre los dos que huelen a sudor y que tienen unas enciclopedias del tamaño de tamaño DINA3.
Una vez sentado en la mesa podemos ver dependiendo del día cualquiera de los siguientes individuos:
El enamorado, que se divide en dos, el que está con la pareja y el que no. El primero es un genio, porque yo no soy capaz ni de enterarme de lo que leo con el sonido de la gente que entra y sale de la sala, pero él, es capaz de no sólo estudiar cogido de la mano de su pareja, sino que además la acaricia, la besa, le mete mano..., vamos que podría tirarsela allí mismo, mientras que se aprende la guía de teléfonos. Claro que no lo hace por respeto, respeto a su puñetera madre!, porque si te tocan de éstos vas a tener que estar aguantando sus sonrisas, miraditas, el sonido de sus besos, los mensajitos en la hoja del otro del tipo: ¿me quieres?, ¡No puedo vivir sin ti!, ¡ Nos vemos debajo de la mesa en media hora!, ¿Los condones los traías tu o me tocaba a mi?.
Luego están los sin pareja, de éstos los mejores son los que tienen foto. Abre su atril, y coloca la foto encima, después de mirarla durante 10 minutos sin pestañear, ya está preparado para empezar a estudiar, yo siempre he tenido la teoría de que su pareja debe ser un sargento, que le ha prometido que si no aprueba, se olvide del sexo por un tiempo. Porque al colocar los apuntes la foto siempre ha de estar visible, y eso es lo mejor, me encanta ver como cada vez que se ha estudiado un folio, el personaje en cuestión tiene que levantar la foto, colocar el folio en el lugar de los ya estudiados, y volver a colocar la foto. Supongo que le inspirara de alguna manera, un día conseguí ver la foto de uno, y salía con una cara de muerto, que soy yo y desde luego que estudiaba...., estudiaba la forma de dejarla sin que me partiera las piernas, aunque claro... para ellos son lo más bello del mundo, aún cuando la foto este hecha antes de su operación de cambio de sexo. Aunque peor el que viene con la foto de su perro, porque.... ¿también el perro le ha dicho que no hay más sexo hasta que apruebe?¿Ni aun untándose con mermelada?.
Otro tipo curioso es el bacala del discman, capaz de estudiar con la música ropiendole los tímpanos. Supongo que ha conseguido quedarse sordo y así se concentra mejor, lo malo es cuando le tienes que decir que baje la música, que a menos que le metas una patada en la espinilla, como no pegues un grito en la sala no tienes nada que hacer. Eso sí, si has conseguido que te preste atención, su contestación de : ¿Qué passsssaaaa? se oirá a grito pelado por toda la sala, en el único momento en que está todo el mundo callado y no suena ningún móvil; porque ¿qué sería de las bibliotecas sin que sonase un móvil cada 10 minutos?, lo peor es que seguro, que es un mensaje de la pareja que está sentado a su lado que se mandan ,para saber si la cita debajo de la mesa sigue en pie o para ver si no han perdido de la memoria de su teléfono el número de la pareja, o eso... o que ella lo tiene en modo vibratorio..., esto, ejem!.
Que francamente en modo vibratorio joroba lo mismo, es genial ver los móviles echando carreras por encima de la mesa. Uno está estudiando los terremotos y pegas un bote en la silla porque te crees que el terremoto ha venido a visitarte.
Hablando de últimas tecnologías ahora la moda es llevarse al portátil a la biblioteca, que te despierta cuando ya habías conseguido dormirte en el sitio ante la imposibilidad de estudio, con la fabulosa música del windows, y es que Bill Gates es cierto que es como un dios, pues está en todas partes, hasta en el examen de estadística de mañana.
.... CONTINUARÁ
7 comentarios
torpin -
Anónimo -
sensero -
pero entonces ves a alguien más observar,
Y oyes una voz ensordecente, casi inaudible que dice: es ella, élla también pertence a tu mundo, ... vamos hijo, levántate toma tus cosas y vé en busca de su presencia.
Enseguida bajas la mirada.
bako -
pedrogonzo -
Almudena -
sendina -